"Esa Mamá"
- Yo
- 10 sept 2016
- 3 Min. de lectura

Como una mamita que trabaja fuera de casa, siento una afinidad inmediata con otras mamis que tratan de hacer compatibles el trabajo y la familia. Yo sé que entienden la lucha de tratar de ser una dedicada madre y profesional al mismo tiempo en el espacio de trabajo. Muchos lugares de trabajo hoy en día dicen ser adecuados para familias, ofrecen horarios flexibles, vacaciones pagas, uno que otro permiso y ayudando de esta manera a dar un mejor equilibrio entre trabajo y vida. Aun así, una mamá trabajadora sabe que siempre están las constantes de las necesidades entre la familia y el trabajo.
Me he convertido en “Esa Mamá”. Tengo una bebita que se queda en casa con la nana a quien llamo repetidas veces a lo largo del día, mis hijos mayores son especiales y ambos están en primaria, así que tienen tareas, proyectos, excursiones, citas médicas, cumpleaños, etc. Muchas amigas han dejado de invitarme a tomarnos un trago a solas después del trabajo porque saben que en mi respuesta encuentren apenas un 10% de probabilidad de que les diga que sí. Aunque me encantaría ir con ellas por esa copita y relajarme, sé que el tráfico a casa con mis hijos y mi esposo hablando de cómo les fue en el colegio o trabajo es el highlight de mis días. Hay veces en que trabajar y ser madre coexisten de manera espantosa y ser “Esa Mamá” puede ser limitante y abrumador.
Una como madre hace lo mejor que puede, pero es una solución de compromiso, gracias a Dios no entro a las 7.00 u 8.00 de la mañana porque tengo que dejar a los niños en la escuela. He escuchado otras mamis quejarse que en su trabajo no las han considerado para proyectos excelentes, porque se supone que por ser madre no va “querer hacer eso”, ya que puede requerir una tarde-noche o dos. Me preocupa que mi jefe o mis compañeros de trabajo no sientan que estoy dando lo mejor de mí, así que constantemente estoy pensando en cómo mejorar la oficina y ayudar a hacer más, incluso cuando estoy fuera de ella. Sé que no puedo comprometerme a nada muy serio en el colegio de mis kids, por que no puedo darme el lujo de ser voluntaria por cuestión de tiempo y trabajo, con todo y eso lo hago cuando me lo piden. No sé qué pasará cuando llegue ese momento en que mis hijos me digan “la mamá de no sé quién si puede ¿porque tú no mami?” muero solo de imaginármelo! La culpa es Real.
Me ha tocado pedir permisos para compromisos familiares y pagar las horas de trabajo en varios casos. Pidiendo disculpas a la familia y a mi jefe. Permitir que estos mundos colidan nunca es ganancia para “Esa Mamá”. La realidad es que para “Esa Mamá”, un montículo de culpa y la exhaustiva búsqueda de la perfección es nuestra carga diaria.
Ser “Esa Mamá” no te hace incompetente en lo absoluto, al contrario, ser “Esa Mamá” sin querer queriendo por el estrés que tenemos al tratar de balancear todo nos hace más dedicadas a lo que hacemos. Nos hace profesionales competentes con una gracia y empatía hacía con los demás que tenemos bajo nuestra supervisión que no tendríamos de no ser “Esa Mamá”.
Así que para aquellas de ustedes que son “Esa Mamá”, buen trabajo queridas!! Sigan malabareando, traten de dormir lo necesario para no decir lo más que puedan…y por supuesto, abraza, acepta, posee orgullosamente el hecho de que eres “Esa Mamá”
Xoxo,
Yo
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